«Mi vagina se cierra impidiendo la penetración»
En muchos casos, esta contracción remite sin dificultades a medida que lo hacen los temores al dolor y aumenta la confianza de la chica. El coito se convierte así en una actividad más, tan placentera como cualquier otra.
Pero cuando esta situación se mantiene, impidiendo el coito y/o produciendo dolor, podríamos estar ante una dificultad conocida como Vaginismo, que consiste en un espasmo involuntario y la consecuente contracción de la musculatura pélvica.
El desencadentante puede ser un problema de tipo orgánico, como inflamaciones pélvicas o las secuelas de ciertas operaciones ginecológicas. Sin embargo, las causas psicológicas son las más frecuentes. La mujer siente ansiedad ante la posibilidad de la penetración. Ya sea por una inadecuada educación sexual, por temor a un embarazo, a la transmisión de infecciones o a sentir dolor.
En Borobil trabajamos para tomar conciencia de los temores que están dando mecha a la ansiedad, y entrenamos a la mujer para enfrentar la situación temida.
Si tienes dificultades para realizar el coito, ponte en contacto con nosotras. Podemos ayudarte.