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¡Salimos en la radio!

Llevamos cuatro temporadas hablando de sexología en Radio Euskadi, de la mano de Elixabete Legarda. Pero lo que nunca habíamos hecho era empezar el año con un repaso de lo que contado durante el anterior. Dejamos aquí los temas más destacados del 2024.

Empezamos el año, y como casi todas las primeras veces (porque, para nosotras hay muchas primeras veces), tiene algo de especial. No va a ser un programa al uso, es decir que, no vamos a abordar un único tema en profundidad; sino que nos gustaría despedirnos del año que se fue, ese 2024 en el que hemos cumplido diez años de andadura profesional como centro Borobil, con un repaso de lo hablado ante estos micrófonos.

Hace más o menos un año, en enero, os propusimos hacer un listado de propósitos sexuales de pareja. Un listado que incluía propuestas como la de hablar de lo que me gusta o no a nivel erótico; de lo que deseamos y también de agendar el tiempo erótico más allá de los encuentros espontáneos: que no quede siempre a la idea de que debe ‘surgir’ o ‘fluir’; lo que permite introducir variantes desde esa planificación.

Link al capítulo: https://eitb.eus/N_6wx6xp/

Otro de los temas que hablamos el año pasado fue, por Carnaval, de cómo la indumentaria puede ayudarnos a jugar a ciertos juegos, roles o prácticas que se alejan de ‘quiénes somos’ o nos ayudan a adoptar algunas actitudes que promueven la excitación o el placer. Máscaras, lencería fina, disfraces…

Link al capítulo: https://eitb.eus/N_9VP3Pj/

Ya en abril tratamos uno de los temas que más vemos en consulta: el del Deseo (la madre del cordero). Cuestión que preocupa a personas de todas las edades, siempre que tengan una relación estable. Y es que, es precisamente en las diferentes maneras de desear ambos, y en la asincronía de estos deseos, donde emergen los problemas. O sea, que el problema del deseo nunca es algo individual, sino una cuestión de dos.

En este programa aprendimos que hay, al menos y  hasta donde ha estudiado la ciencia, dos grandes maneras de desear: el deseo «espontáneo», como un impulso que precede y/o acompaña la excitación y el orgasmo, y que ocurre mayoritariamente en los hombres o en aquellas mujeres que están iniciando una nueva relación.  Y el deseo «reactivo», que no es espontáneo, sino que aparece tras la excitación. Para una mayoría de mujeres (y cada vez más hombres) lo más habitual es que al inicio del encuentro la postura sexual sea neutra, y si los estímulos son suficientes y adecuados, se produzca el paso de la neutralidad a la excitación y el deseo. Si el resultado es positivo, emocional y físicamente, ello induce al aumento de la motivación sexual.

La gratificación, en este caso, se consigue por la satisfacción y el placer (sea con orgasmo o sin él) y con otros aspectos subjetivos como la comunicación con la pareja, la intimidad emocional, la expresión de afecto, el compartir placer físico, complacer al compañero, la autoestima (sentirse atractiva, femenina, apreciada, amada o deseada) el relax o el bienestar.

Link al capítulo: https://eitb.eus/N_AKzDX2/

El 28 de mayo se celebra el día de la higiene menstrual. Una cuestión, no solo de salud, sino también de derechos humanos. Toda persona tiene derecho a la autonomía corporal. La capacidad de cuidar del cuerpo mientras se menstrúa es parte esencial de esta libertad fundamental. Sin embargo, se estima que 500 millones de personas carecen de acceso a productos menstruales y a instalaciones adecuadas para la salud menstrual. Volviendo a casa, según recoge el estudio sobre la pobreza e higiene menstrual, elaborado por Emakunde con el apoyo de EDE Fundazioa en 2022, un total de105.000 mujeres de Euskadi habrían tenido dificultades económicas para hacer frente al gasto en productos menstruales en algún momento de su vida. Para ello, algunos de los objetivos son el de normalizar la regla, visibilizarla, y exigir que se baje el IVA a estos productos de primera necesidad.

Link al capítulo: https://eitb.eus/N_gYMOPV/

Llegamos a junio hablando de diversidad sexual, y en concreto, del concepto de homofobia y lesbofobia interiorizada, que son los sentimientos negativos hacia la propia orientación sexual.  Sería la aversión que experimenta una persona homosexual hacia la homosexualidad, o incluso hacia aquello que sea o parezca manifiestamente homosexual.

La homofobia y la lesbofobia interiorizada están formadas por representaciones mentales según las cuales, la atracción hacia personas del mismo sexo se valora como inferior respecto a la heterosexualidad, como resultado de los mensajes sociales negativos y la imagen distorsionada que tenemos de la homosexualidad.

La sociedad ejerce una fuerte influencia en el autoconcepto de las personas, a través de mensajes que se quedan en nuestro inconsciente y que nos marcan. En el momento en que alguien se reconoce como gay o lesbiana, todos los conceptos erróneos  que se asocian con la homosexualidad se asumen como propios. Por tanto, las falsas creencias que se nos han transmitido a nivel social acerca de las personas cuya orientación sexual se dirige a la gente del mismo sexo, influyen en la autoestima, que se suele ver mermada. Dado que, en la homofobia interiorizada, la clave está en los mensajes sociales, el primer paso sería que la cultura empezara a enviar mensajes positivos acerca de las personas homosexuales en el cine, series, noticias, redes sociales, programas de tv, etc.

Link al capítulo: https://eitb.eus/N_KAPp2E/

Avanzamos en el año y llegamos a la discusión. Ese temido momento que solemos intentar evitar a toda costa pero que, ¡oh sorpresa!, volvemos a ello. Esa recurrencia no es casual, sino que está relacionada con la manera en que discutimos, y con esa estrategia de evitación. Discutir bien se puede, si sabes cómo (nos ha quedado como un eslogan para dejar de fumar). Pero de verdad, lo creemos.

De hecho, ahí va otra frase hecha: Amar implica confrontar, o «Quien bien te quiere, discutirá contigo». Sabemos que el refrán es diferente, pero nos parece que así se ajusta más a la realidad. Porque discutir no tiene por qué implicar malestar, pero sí puede ayudarnos a construir relaciones igualitarias en las que, lo que tú necesitas y deseas, sea tan importante como lo que quiere y necesita tu pareja.

Lo fundamental para comunicar, es escuchar. De manera activa, tratando de conectar con las emociones que siente el otro con respecto a aquello que nos relata y con un objetivo: entendernos.

Link al capítulo: https://eitb.eus/N_Y3r9eY/

En noviembre hablamos de la sexualidad pasados los 60. Y es que, probablemente debido a esta visión que simplifica el sexo refiriéndolo a lo que se hace especialmente con los genitales; se ha extendido la idea de que, llegados a esta edad, comienza una etapa en declive. Y aunque es cierto que ocurren cambios, éstos no tienen por qué implicar deterioro o un descenso en el goce. El sexo es lo que somos y la sexualidad se expresa en todas y cada una de nuestras experiencias y sensaciones. Entender y atender esta esfera sin vergüenza, culpa o prejuicios, resulta clave para vivirla satisfactoriamente. Promover la conexión con el cuerpo, los deseos, el placer y las emociones sexuales son objetivos primordiales para todas las personas, también las mayores. La sexualidad de las personas mayores sigue estereotipada y juzgada negativamente. Las personas mayores tienen derecho a vivir y expresar su sexualidad, y a solicitar que se atienda a su salud sexual y se respeten sus decisiones.

Link al capítulo: https://eitb.eus/N_lKxLkL/

Y para cerrar, diciembre fue el mes del dolor durante las relaciones sexuales, algo que una mayoría de mujeres ha experimentado molestias en sus genitales en alguna ocasión en su vida. Cuando este dolor es crónico se llama dispareunia.

La dispareunia no solo dificulta que las relaciones sexuales sean gratificantes, sino que, además, el miedo a sentir ese dolor puede dificultar la excitación sexual o impedir el orgasmo. Este mismo miedo puede producir un incremento importante en la tensión que dificulte abandonarse a la experiencia y gozar del encuentro, o facilite la aparición de problemas como el vaginismo. No es infrecuente que, si este problema se mantiene, la mujer progresivamente vaya perdiendo interés en su actividad sexual, y otras dificultades secundarias como la falta de orgasmo y de deseo sexual.

Link capítulo: https://eitb.eus/N_0WnL1x/

Escucha el programa completo con el repaso, aqui.

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